Claudia Bahamón/GENTE/Mayo 2009

El sábado 2 de mayo comienza a circular en nuevo número de GENTE. Los dejamos con un abrebocas del tema de tapa. Si quieren ver más fotos y saber qué más trae este número revisen este enlace. ¡Cómprenla ya!

Se despidió de su exitosa carrera como presentadora de noticias para casarse con el director de cine Simón Brand. Se fue con él a vivir a Los Ángeles. Hace poco más de un año dejó de lado el glamour y cualquier posibilidad de convertirse en conductora de algún canal latino de Estados Unidos para dedicarse a la crianza de su hijo Samuel. Mamá Claudia habló con GENTE.

Fotografía: Ricardo Pinzón / Revista GENTE / Colombia.

No es fácil. Los niños no vienen con instrucciones y a Claudia Bahamón, como a muchas otras madres, le ha tocado improvisar por el camino. Improvisar, además, en un mundo distinto, con otras reglas, como es Los Ángeles, la ciudad donde ahora vive. “Oiga, su niño está comiendo tierra”, escuchó en inglés, en forma imperativa con tono de desaprobación.

Era la voz de una de las madres que comparten con ella las jornadas de los pequeños en un parque rodeado por rejas. Claudia recordó sus años de infancia en Neiva, la libertad de sus juegos callejeros, sin barreras en los parques ni reglas para todo. “En Estados Unidos todo es demasiado by the book (según el manual)”, refl exiona, pensando en que, como en muchos otros asuntos de la vida diaria, para los gringos la crianza de los hijos parece ser una receta sin espacio para la espontaneidad. “Hay una agenda para todo, hasta para encontrarse con los amiguitos hay que hacer un date (una cita)”, dice asombrada, mientras compara con aquellos tiempos en que lo único que tenía que hacer para reunirse con sus amigos era atravesar la puerta de su casa. “Todo parece estar hecho childproof (a prueba de niños). En Colombia siempre me machuqué con los gabinetes de la cocina y en mi casa de Los Ángeles no puedo ni abrirlos, necesitas instrucciones hasta para ir al baño porque la tapa del inodoro está diseñada ‘a prueba de niños’, porque de pronto se caen dentro. En mi casa somos tres hombres y yo, y cuando éramos pequeños seguramente alguna vez jugamos con el agua del inodoro y alguien, incluso, habrá metido un pie en la taza, pero de eso nadie se muere”. Como nadie se muere por comer un poco de tierra. “Yo me sentaba a mirarlo mientras jugaba y sí, se llevaba las manos llenas de tierra a la boca y después la escupía y no lo volvía a hacer. Es un niño, pero no es bobo”.

Claudia trata por todos los medios de que Samuel, hasta ahora el único hijo producto de su matrimonio con el director de cine Simón Brand (Paraíso Travel), tenga, en lo posible, la libertad de aprender que ella tuvo y que le permitió conocer a qué sabe la tierra, cómo es subirse a un árbol, correr por las calles y, ya en la adolescencia, compartir tardes de sol y piscina en el club con amigas de su infancia como María Isabel Jaramillo, ahora propietaria de una exitosa empresa de comida a domicilio en Bogotá. Claudia asegura que siempre soñó con ser mamá. María Isabel asegura que nunca hablaban de eso. Recuerda, eso sí, que “siempre ha sido muy juiciosa”. Sin embargo, la decisión de dejarlo todo por su familia sorprendió a muchos de los que la conocían. “Me preguntaban: ¿cómo así que va a renunciar?”… LEAN EL ARTÍCULO COMPLETO EN LA EDICIÓN IMPRESA.